Estasis de sangre acumulada en el bazo 瘀血积脾 Yū xuè jī pí

Eduard Genís Sol, abril del 2018.

El bazo gobierna el transporte y la transformación (脾主运化, Pí zhǔ yùn huà) y, además, controla la sangre (脾统血, Pí tǒng xuè). La irregularidades dietéticas o bien un exceso de trabajo pueden dañar la ingesta del bazo y la función de transporte y transformación de esta víscera; ello provocará que el se estanque en el calentador medio y que el del bazo quede dañado. Si lo está durante largo tiempo, el bazo perderá su capacidad de contener la sangre, con lo cual ésta se derramará fuera de los vasos y se estancará en los intestinos en forma de una estasis de sangre (血瘀, Xuè yū) que, una vez formada, no tan sólo no podrá llevar a cabo su función nutritiva, sino que, además, ocasionará un estancamiento de los fluidos intestinales y acabará generando acumulaciones y acopios (积聚, Jī jù). De otra parte, una estasis de sangre en el estómago y en los intestinos puede agravar el estancamiento previo del del bazo y, con ello, perjudicar el transporte y la transformación de esta víscera; esta situación se concretará en forma de bultos, de un nudo en el estómago que será doloroso, de distensión y plenitud abdominal, de piernas cansadas, de vómitos y diarrea y de hinchazón por agua. Todo este conjunto de manifestaciones se conoce como “acumulación de bazo (积脾, Jī pí)” que, como hemos visto, se produce a partir de un estancamiento del del bazo que conlleva un estancamiento del con estasis de sangre (气滞血瘀, Qì zhì xuè yū).

Adicionalmente, una tierra congestionada y una madera sobrepresionada impiden el libre fluir del de la vesícula biliar, situación que puede provocar que la bilis se extravase de sus conductos y se esparza por el cuerpo, la cara y la esclerótica en forma de ictericia (黄疸, Huáng dǎn).

Finalmente, hay que tener en cuenta que los desórdenes emocionales pueden sobrepresionar el del hígado, con lo cual esta víscera puede invadir el bazo, dando lugar con ello a una desarmonía hígado-bazo (肝脾不调, Gān pí bù tiào).

* Este artículo es un pequeño fragmento de nuestro libro “Las manifestaciones de las vísceras (脏象,  Zàng xiàng)”.

eduard@medicinachinahoy.com

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